
Lyria de Aetheron
Heroína Legendaria / Sacrificada (Vida Anterior de Lyra)
Facción
Estado
Rasgos
La Infancia Dorada: Lyria de Aetheron creció junto a su hermano Kael en tiempos más felices, cuando ambos eran inseparables. Jugaban 'entre árboles ancestrales, sus risas mezclándose con el susurro del viento', ella con 'mechones que atrapaban la luz del sol' contrastando con los 'cabellos oscuros como la medianoche' de Kael. Bajo las estrellas hicieron una promesa que definiría sus destinos: 'Siempre juntos, Lyria.' 'Siempre, Kael.'
La Guardiana de la Luz: Lyria poseía una belleza tanto física como espiritual extraordinaria, con 'ojos como estrellas atrapadas en amatista' que reflejaban 'una determinación forjada en el crisol del dolor'. Su corazón puro veía lo mejor en todos, incluso en su hermano cuando comenzó a cambiar, manteniéndose fiel a su amor fraternal hasta el final.
Maestra de la Magia de Luz: Su dominio de la magia era incomparable. De sus 'manos extendidas fluía una luz dorada, pura, un torrente de rectitud que se alzaba contra la marea de corrupción'. Su poder representaba 'Magia de la Luz, llevada a sus extremos, no para crear, sino para preservar, para proteger lo poco que quedaba' del mundo que se desmoronaba.
El Dolor de la Hermana: Durante la Guerra, Lyria sufrió viendo la transformación de su hermano amado. Sus súplicas resonaban con angustia muy humana: '¡Esto es una locura, Kael! ¡Destruirás todo lo que alguna vez amamos!' Aunque 'resonaba con poder arcano', su voz 'temblaba con una angustia muy humana' al presenciar la locura de Kael.
La Protectora del Mundo: En los momentos finales de la Guerra, mientras 'continentes enteros se convulsionaban' y 'ciudades que habían tardado milenios en construirse eran borradas de la existencia', Lyria canalizó 'el poder de soles distantes' para materializar 'un escudo de proporciones inimaginables', intentando proteger 'un enclave de supervivientes aterrorizados' en las ruinas de Aethelgard.
El Sacrificio Supremo: Enfrentada a la imposibilidad de detener a Kael por la fuerza, Lyria tomó la decisión más difícil de la historia. 'Canalizó todo lo que era, todo lo que había sido, todo lo que podría haber sido. No solo su poder, sino su esencia, sus recuerdos, su amor por un mundo que se desvanecía.' Su cuerpo 'se convirtió en un sol en miniatura, una nova de energía pura y desesperada.'
La Ofrenda de Amor: Su sacrificio no fue venganza, sino el acto de amor más puro: 'La luz de Lyria explotó hacia afuera, no como un ataque, sino como una ofrenda. No buscaba destruir a Kael, sino contenerlo, neutralizar la ponzoña de las Artes Prohibidas que él había desatado. Era un acto de amor último y terrible.'
La Plegaria Final: Su último pensamiento consciente fue una plegaria a los Dragones de Cristal: 'Que algo perdure. Que la esperanza no muera del todo.' Los Dragones, reconociendo la nobleza suprema de su sacrificio, 'tejieron un capullo de magia dracónica, atrapando la esencia dispersa de Lyria' y la preservaron como 'un secreto guardado en el corazón de la piedra y el hielo' hasta su reencarnación como Lyra Luminar mil años después.
Legado Eterno: Aunque su forma física 'se disolvió en la luz', su sacrificio fundó espiritualmente el Reino de Luminar y estableció los principios de esperanza y rectitud que guían el mundo. Su memoria vive en cada acto de bondad y en la promesa cumplida de que 'algo perduraría' tras la devastación.